Fue en España donde los hombres aprendieron que es posible tener razón y aun así sufrir la derrota, que la fuerza puede vencer al espíritu y que hay momentos en que el coraje no tiene recompensa. Ha sido en España, 72 años después de que la razón fuera derrotada por la fuerza, donde ha surgido un nuevo movimiento de esperanza en una vida mejor. Los jóvenes y no tan jóvenes de nuestro país han alzado la voz contra la corrupción, la explotación, los privilegios, la dictadura económica disfrazada de una falsa democracia.
Los que piensan que este movimiento de la sociedad está condenado al fracaso están muy equivocados. Los que se creen adscritos al poder, esa ilusión mental, han cometido tres errores: el primero, el desalojo de Sol; el segundo, el desalojo de plaza Catalunya; y el tercero, ignorar las peticiones del pueblo; eso lo van a pagar, no les quepa duda. Esperemos que no cometan el cuarto error: el de reprimir al pueblo.
- Imágenes sacadas en las concentraciones de Málaga
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